Ciudad de México, 27 de septiembre (SinEmbargo).– Agobiado por los estragos de los huracanes, “Ingrid” y “Manuel”; Michoacán se preparaba ayer para recibir al Presidente en Zitácuaro, pero todo fue en vano. Por tercera ocasión, Enrique Peña Nieto canceló su gira a esa entidad cuya crisis social va más allá de los desastres naturales presentes.
En Michoacán, el flagelo de la violencia no ha cedido. En su entorno siguen desplegados casi 10 mil elementos del Ejército y la Policía Federal, así como unos diez grupos de autodefensa o policías comunitarias.
La Presidencia de la República informó que la gira a Zitácuaro de Peña Nieto fue cancelada debido a las malas condiciones climatológicas, producto de un centro de baja presión con potencial de desarrollo ciclónico al sur de las costas del estado, que impidieron volar en helicóptero.
La cancelación de la gira avivó las críticas del Partido de la Revolución Democrática en la entidad. Pronto, el presidente de ese partido en la entidad, Víctor Manuel Báez Ceja, salió a una conferencia de prensa. “La cancelación de la visita de Enrique Peña Nieto a una esquinita de Michoacán, en donde encabezaría una presunta gira de trabajo, es muestra de que al PRI en Los Pinos poco o nada le interesa Michoacán”, expresó y sostuvo que hasta el momento, el gobierno federal sólo ha enviado a la entidad funcionarios menores, quienes han hecho visitas de pocas horas.
Ayer, quien sí descendió en Zitácuaro, fue el secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza. Fue una visita breve durante la cual, dijo que las carreteras federales afectadas serán rehabilitadas en un plazo no mayor a cinco días. También giró la instrucción de que en menos de cuatro meses queden restablecidas en su totalidad las autopistas federales y estatales.
En cuanto a la visita del Presidente, al parecer todo queda en “veremos”. El presidente municipal de Morelia, Wilfrido Lázaro Medina, puso en duda que Peña Nieto asista al Natalicio de José María Morelos y Pavón el próximo 30 de septiembre. El alcalde expuso que la capital de Michoacán está lista para tal festejo y que ya hay un plan en caso de que las condiciones climatológicas sean adversas.
¿QUÉ TIENES, MICHOACÁN?
A finales de julio, miembros de grupos de autodefensa, el Ejército y agrupaciones asociadas con el Cártel de Los Caballeros Templarios se enfrentaron en varias comunidades de Michoacán. Hubo por lo menos 40 muertos. El 26 de julio Peña Nieto visitó Veracruz donde se efectuó la ceremonia de graduación de los guardiamarinas de la Heroica Escuela Naval Militar. En el avión presidencial, habló de Michoacán. Anunció que había reforzado la presencia de las Fuerzas Armadas y de la Policía Federal.
En ese pequeño espacio, se comprometió a atender demandas sociales como educación y agua potable en las regiones donde había más “debilitamiento institucional”. En aquella ocasión, el Presidente reconoció que parte del territorio de Michoacán los había ganado el crimen organizado y el operativo de su gobierno tenía como objetivo la recuperación territorial de las zonas donde las autoridades habían sido superadas.
Hizo notar que la ausencia del gobernador Fausto Vallejo –quien pidió licencia por motivos de enfermedad– no facilitó que hubiera una mayor coordinación.
Después, en agosto, el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, se reunió con el mandatario interino de Michoacán, Jesús Reyna. La dependencia informó en un comunicado que el mapa de violencia fue analizado para encontrar la solución pertinente.
BITÁCORA DE UN DESDÉN
Peña Nieto no se ha parado en el territorio michoacano ni como candidato ni como Presidente de la República. En mayo de 2012 fue la primera cancelación. La única razón que brindó fue que sus actividades quedaron empalmadas en su agenda. Asistiría a la entidad para dar su respaldo al candidato a la presidencia municipal de Morelia para la elección extraordinaria, Wilfrido Lázaro Medina, quien abrió su campaña con el boxeador Juan Manuel Márquez. Este pugilista había causado revuelo por usar en su calzoncillo el logotipo del PRI durante una pelea en Las Vegas.
Ya con la banda presidencial, el Presidente anunció una gira por Michoacán para la primera quincena de enero. Ante la cancelación, el gobierno del estado informó que la visita del primer mandatario se realizaría la última semana de ese mes. Después se crispó la crisis de seguridad en la que decenas de personas murieron. Ayer, Peña Nieto canceló su gira por mal clima.
En los primeros nueve meses de gobierno de Enrique Peña Nieto, el mandatario ha visitado el Estado de México en ocho ocasiones, el mayor número en comparación con el resto de los estados, pero no ha pisado el suelo de cuatro entidades.
Sonora, Michoacán, Oaxaca, Baja California Sur no han contado con la presencia del primer mandatario. Tamaulipas fue un estado en el que también había cancelado visitas, pero Peña Nieto viajó ahí este mes debido al embate del huracán Manuel.
¿Y QUÉ HACÍA PEÑA NIETO?
Mientras que el templete en Zitácuaro se desmontaba, el Presidente Enrique Peña Nieto acudió al Zócalo de la Ciudad de México donde recorrió los centros de acopio del Ejército y la Secretaría de Marina. Recibió ahí reportes de lo acumulado hasta el momento y el destino de las despensas.
El mandatario escogió la ocasión para lanzar frases alegóricas. Le pidió a San Pedro, el apóstol que según uno de los libros de La Biblia está encargado de las puertas del cielo, “que cierre un poquito la compuerta”.
Esa plaza pública estuvo ocupada hasta el 13 de septiembre por el campamento de los maestros opuestos a la reforma educativa y desalojada para el Primer Grito de Independencia de Peña Nieto. La misma noche del 15 el primer mandatario tuvo que alterar su agenda y abandonar la fiesta en Palacio Nacional debido a que los fenómenos “Ingrid” y “Manuel” habían tocado tierra en México y la contingencia era alta. Parado ahí, expresó: “Si me dicen de dónde podríamos esperar una buena ayuda sería de allá arriba, que dejara de llover un poquito para poder hacer las labores, además de apoyo a la población de control en la zona donde hay que reconstruir y encauzar ríos porque hoy no se puede por la fuerza del agua y los deslaves que siguen en Guerrero”.